
Si tienes adolescente en casa, sabes lo difícil que es esta etapa donde nuestros hijos están en busca de su identidad, tratando de controlar sus emociones, cambios hormonales, toda esta avalancha de sentimientos no siempre es fácil para ellos.
Es necesario que como padres les ayudemos a descubrirse, aceptarse y a amarse.
Es clave cultivar en ellos el amor propio, pues también es una etapa donde ellos buscan validación social y aceptación.
Muchas veces como padres ya sea consciente ó inconscientemente no aportamos a una autoestima saludable con nuestros comentarios .
Te mencionaré algunos puntos importantes a considerar para abonar a nuestras plantitas en crecimiento y mejorar el amor propio en ellos.
1. Elogios sinceros
Muchas veces nos enfocamos más en la crítica que en los elogios. Es un error bastante común que cometemos como padres. Acostumbrémonos a felicitar más a nuestros hijos por sus logros y por su esfuerzo cuando no logren alcanzar algún resultado deseado. Que ellos vean que cuentan con nuestro apoyo y que nos sentimos orgullosos de ellos.

Los adolescentes con baja autoestima muchas veces se sienten incómodos aceptando elogios pero que esto no te detenga de hacerlos.
2. Crítica de manera constructiva
Es importante hacerles observaciones que ayuden a edificarles y no a destruírles ó dañar su dignidad.
3. Tu ejemplo habla más que mil palabras.
Si tu eres de las personas que pasan más enfocadas en sus propios defectos y aspectos negativos que en lo positivo y vives autocriticándote, tu adolescente seguramente te imitará fijándose también en sus propios defectos más que en sus virtudes.
4. Permítele expresar sus opiniones
Incluye a tus hijos en las decisiones familiares permitiéndoles expresarse y orientándoles a hacerlo correctamente.
Para tu adolescente es muy importante sentirse considerado y tratado como un adulto. Esto ayudará a fortalecer la confianza y el respeto.
5. Hazle conocer su identidad en Dios.
Háblale que fue creado con propósito divino y para esto Dios le lleno de muchos dones y talentos. Háblale de cuan amado y precioso es a los ojos de su creador.